El análisis positivo de materiales (PMI) es un Ensayo No Destructivo que abarca un amplio campo de aplicaciones en la industria, como puede ser en la fundición de materiales metálicos para la fabricación de estructuras y equipos, la inspección de estas estructuras en servicio, clasificación de chatarras, estudio de materiales empleados en una eventual reparación, composición química en la compra o recepción de productos, minería, composición metales en pinturas, etc…
En la actualidad son habituales dos métodos de empleo para el análisis de materiales: la Espectrometría y la Fluorescencia de rayos X.
Espectrometría:
En el salto por arco eléctrico en una aleación de material una pequeña cantidad de sustancia se evapora. La longitud de onda de la luz emitida depende de los elementos contenidos en la aleación.
La ventaja principal de los espectroscopios se centra en la capacidad de determinar componentes no metálicos en una aleación. La mayor desventaja consiste en la necesidad de preparación superficial óptima de la zona a ensayar, además de la huella que genera la chispa en la zona de contacto de la muestra ensayada.
Fluorescencia de Rayos X (FRX):
Se basa en el análisis de un haz de la radiación X emitido en la superficie del elemento objeto de estudio. La emisión de la radiación del metal analizado es sometida a análisis energético para determinar la composición química y el contenido porcentual de los elementos de una aleación.
Los equipos de FRX permiten identificar y clasificar la composición química en aleaciones y metales en tiempos cortos, siendo su manejo sencillo y permitiendo la portabilidad.
El principal campo de aplicación de la FRX es el análisis cualitativo y cuantitativo de materiales férreos y no férreos, con el objetivo de comprobar que los componentes integrantes de una aleación son conformes con las exigencias de las ingenierías, requerimientos de los clientes y la documentación técnica aplicable, sin precisas de un nivel exigente de preparación superficial de las muestras analizadas, y sin producir ningún tipo de huella o marca en ellas.
El inconveniente que presentan es que los elementos aleantes no metálicos no pueden ser determinados, ni tampoco es posible determinar el porcentaje de Carbono.
El último inconveniente consiste en el hecho de que los analizadores de PMI por fluorescencia de rayos X (FRX) contienen una pequeña fuente de rayos X, lo que implica que el personal operador de los equipos debe cumplir con los requisitos del Consejo de Seguridad Nuclear, siendo necesario disponer de Licencia de Operador de Instalación Radiactiva en vigor y seguir las medidas de seguridad necesarias.
En ipunto END, S.L. disponemos de una pistola de fluorescencia de rayos X (modelo Delta de Olympus), capaz de analizar parámetros para aleaciones metálicas con composición en Ti, V, Cr, Mn, Fe, Co, Ni, Cu, Zn, W, Hf, Ta, Re, Pb, Bi, Zr, Nb, Mo, Pd, Ag, Sn, Sb, Mg, Al, Si, P, S. Además de disponer de una biblioteca identificativa de aleaciones con más de 500 especificaciones.
La particularidad de nuestro equipo es que cuenta con una estación de trabajo blindada para el empleo de ensayos en sobremesa que exime de la necesidad de contar con la licencia de operador de instalaciones radiactivas. Para que esto sea factible, las muestra para analizar deben tener un tamaño no superior al cajón blindado.
